25.11.20
¿Qué tipo de ventanas existen? - Por tipo de apertura
¿Sabes lo que debes o puedes considerar a la hora de elegir una ventana? En esta serie de artículos te vamos a mostrar desde los tipos de ventanas por apertura que hay, los materiales principales que puedes elegir y algunas claves para decidir cuál es mejor para ti y tu casa.
La elección de la ventana puede dar un enfoque totalmente distinto tanto a una habitación desde el interior como desde el exterior. Las ventanas son las encargadas de estructurar la fachada de los edificios. Son de hecho unos elementos lo suficientemente importantes en el día a día como para detenernos a considerar todas las opciones que tenemos.
En la elección del tipo de ventanas podemos analizar muchos puntos, pero los más comunes suelen ser:
- Preferencias personales y recursos económicos
- Características del edificio o vivienda
- El entorno climatológico y ambiental donde se ubica
¿Qué es lo que podremos elegir a la hora de escoger una ventana?
- El tipo de apertura
- La forma y el tamaño
- El diseño
- El material tanto del marco como del tipo de cristal
TIPO DE APERTURA
Con los tipos de apertura lo que se busca principalmente es que sean funcionales, es decir, fáciles de utilizar. Por lo tanto, este debe ser uno de los requisitos en los que debemos pensar cuando diseñamos o elegimos una ventana.
La verdad es que, de nada te va a servir unas ventanas con un gran diseño y muy bonitas, sino la puedes abrir o usar de forma cómoda.
¿Cuántas opciones de aperturas tenemos?
Hay una extensa variedad de posibilidades. Lo primero que vas a tener que determinar es, si la apertura va hacia el interior, hacia el exterior o va a ser hacia el mismo plano. Esto va afectar totalmente a cómo vamos a interactuar con la ventana y sobretodo dependerá del espacio disponible alrededor de la misma. En caso de que se abra hacia fuera, lo habitual es que el marco cuente con un limitador de apertura.
Para distinguir en este tipo de esquemas el movimiento de la hoja, debes saber que, cuando el trazo es continuo, el sentido de apertura será hacia el usuario y si el movimiento de la hoja es en sentido contrario al usuario, se indicará con trazo discontinuo.
Otro punto que tenemos de distinguir es, si la abriremos de forma manual mediante una manija o con un accionamiento de cadena o motorizada. Sabemos que una manual es la más habitual pero por ejemplo, en ventanas que se abren hacia el exterior la opción de la manija o motorizada puede ser una buena decisión. Entonces, ¿qué tipo de apertura tenemos?
Ventana practicable o con bisagra lateral
La hoja de la ventana se puede abrir completamente a 180 grados.
Ventana abatible o con bisagra inferior o superior
Este elemento esta equipado normalmente con una manija o un pestillo, y al accionarla, la hoja de la ventana se moverá a una posición inclinada, quedando uno de los lados fijo, ya sea el superior o el inferior.
Ventana oscilobatiente
La ventana se podrá abrir completamente a los 180 grados, pero además cuenta con una posición inclinada, generalmente diseñada para ventilar. Gran aislamiento térmico y acústico por su cierre a presión.
Ventana corredera
La ventana corredera se puede abrir deslizándose mediante uno o más rieles de forma horizontal.
Normalmente un sistema monorriel combina una hoja móvil con una acristalada fija, pero en un sistema de dos guías, ambas hojas se podrán deslizar, por lo que se podrán superponer en ambos lados de las hojas, pero siempre quedarán superpuestas una al lado de la otra, teniendo como opción abrirse de izquierda a derecha o viceversa, siempre en un punto estarán una sobre la otra.
En el caso de una ventana más grande donde podemos pensar en varias hojas e incluso tener 3 o 4 guías, esto realmente nos ayudará a aumentar de esta forma el área de apertura máxima cuando están abiertas.
Ventana corredera elevadora
En principio, este tipo de ventanas garantiza una mayor estanqueidad al viento, al aire y al agua. Suele plantearse para formatos de grandes superficies acristaladas y nos facilitan el deslizamiento porque al elevarse nos cuesta menos trabajo.
Ventana osciloparalela
Con este sistema lo que vamos a conseguir es un cerramiento como una abatible pero con la funcionalidad de las correderas, lo que quiere decir que no va a invadir el exterior o el interior. Normalmente la hoja se va a deslizar siempre en frente de una parte fija. Tiene grandes propiedades herméticas gracias a su cierre de presión perimetral.
Ventanas plegables
Las hojas de este tipo de ventana se pueden abrir plegándose en un secuencia normalmente de una apertura especifica. Un sistema de ventanas plegables lo que va a crear es una apertura total. En este sistema las hojas acristaladas se van plegando hacia el interior o exterior de una pared usando un carril.
Ventanas fijas
Las ventanas fijas o panorámicas, como es lógico, no nos van a dar la posibilidad de abrirlas. Su función por lo tanto es dar luminosidad y no perder las vistas hacia el exterior.
Como conclusión a la hora de elegir el tipo de apertura de la ventana es necesario tener en cuenta los siguiente factores:
- ACCESIBILIDAD: Si lo que quieres es tener mayor superficie de accesibilidad hacia el exterior, la apertura debe ser practicable o plegable.
- ESPACIO LIBRE: Si el mobiliario no te va a permitir abrir la ventana o va a topar con algún mueble, tendrás que optar por una tipo corredera.
- EFICIENCIA ENERGÉTICA: Si lo que buscas es ahorra máxima energía y asilar del ruido posiblemente la apertura que necesites sea la practicable, la oscilobatiente o la osciloparalela, ya que estas son las que cuentan son los cierres herméticos.
- VISTAS DESPEJADAS: Para espacios grandes de acceso, por ejemplo de la sala a la terraza o al jardín puedes valorar ventanas tipo correderas con varios carriles o plegables que realmente son las que nos van a conectar mejor estas dos áreas.
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